Consejos útiles para asegurar la inocuidad de la carne de pollo
14 agosto, 2019
Durante la preparación de la carne de pollo en la cocina, es necesario tomar medidas para evitar la contaminación. Todos sabemos que no se debe comer pollo que no ha sido cocinado adecuadamente, por ende, compartiremos pasos importantes para garantizar la seguridad en su preparación. Limpieza Lavarse las manos con jabón y agua tibia antes […]

Durante la preparación de la carne de pollo en la cocina, es necesario tomar medidas para evitar la contaminación.
Todos sabemos que no se debe comer pollo que no ha sido cocinado adecuadamente, por ende, compartiremos pasos importantes para garantizar la seguridad en su preparación.
Limpieza
Lavarse las manos con jabón y agua tibia antes y después de manejar pollo crudo.
Lavar tablas para cortar, platos, utensilios y superficies con agua y jabón antes y después de preparar cada alimento, así como antes de preparar el próximo platillo.
Separación
Separar el pollo crudo de otros alimentos tanto en el carrito y bolsas de compras, como en la cocina y en el refrigerador.
Utilizar una tabla para cortar productos frescos y utilizar una tabla exclusiva para la carne cruda (ya sea de res, pollo o pescado).
Cocción
Cocinar siempre el pollo por completo.
Las bacterias presentes en la carne cruda sólo pueden eliminarse cuando ésta se cocina a una temperatura interna adecuada. Para el pollo y carnes de otras aves, la temperatura mínima adecuada de cocción es de 74°C (165°F) y siempre se debe cocinar hasta que llegue a esa temperatura interna.
Utilizar un termómetro para alimentos para determinar con precisión si la carne ha alcanzado su temperatura interna mínima de cocción.
Para recalentar platillos, se recomienda cubrir los recipientes para retener la humedad y asegurar que el pollo se caliente por completo. Cuando el platillo incluya caldo o salsas, se deben de hervir antes de servir.
Enfriamiento
Refrigerar el pollo que haya quedado después de preparar una receta, en un plazo no mayor a dos horas. Este es seguro de consumir en los próximos dos o tres días.
Mantener el refrigerador a una temperatura de 4°C o menor.
Congelar el pollo crudo si no se va a utilizar en los próximos dos días. Si está empacado correctamente, el pollo puede permanecer congelado hasta por un año.
Descongelar el pollo en el refrigerador y no en la barra de la cocina.
Durante la preparación de platos con carne de pollo, es importante tomar en cuenta estos útiles consejos para consumir este alimento de manera segura.
Por: Equipo Editorial del Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne), Ciudad de México.